Por algunos considerada como Tiburón del Siglo XXI, The Shallows es una película que funciona como un espectáculo audiovisual, no como una narración completa, mucho menos como una compleja, imposible pensarla como una narración sutil con contenido distinto al que se refieren sus imágenes.

Si la formula de las películas modernas de terror es “Chica + Situación Difícil”, The Shallows puede ser resumida como «Chica Guapa + Tiburón».

The Shallows, en un párrafo

The Shallows es básicamente una situación que se extiende por cerca de dos horas, la anécdota que da inicio a la obra inaugural del cine de blockbuster, si hablo de Jaws, es estirada por Jaume Collet-Serra (director de entre otras Orphan) para dar paso a una película absurdamente hija de su tiempo. Un retrato audiovisual innecesariamente hijo del nuevo milenio, en la cual la protagonista  Nancy, interpretada por Blake Lively, es básicamente un superhéroe sin capa que puede hacer uso de todos los recursos que el “guión” le indica utilice para sobrevivir, incluido pensar de manera fría, sobrevivir a la hipotermia, recordar detalles absolutamente olvidables en situación de crisis y sobre todo recordar grabar un saludo a su familia (y de paso superar a todos las selfies) en la GoPro del hombre muerto random número 3.

Una película que más que película puede ser considerada una “historia” de Instagram. Las imágenes son bonitas, la chica es guapa, pero no suceda nada interesante.