MiniReview: Citizenfour
Me tomó varios meses decidir si hablar o no de Citizenfour, quizá me tardé demasiado, en especial pensando en su actual condición como ganadora del Oscar (™) en su categoría, pero si bien es un documental interesante que pone en evidencia los problemas de nuestra vida virtual, también es un documental que carece una propuesta visual que sea atractiva y/o por lo menos acorde al tema que trata.
Pasa con Citizenfour que todo lo cuenta como si se tratara de un reportaje en el diario o en un blog, pues carece de todo lo que creo conforma una buena película; una relación visual entre contenido y forma, entre el conflicto y el modo de representarlo.
Si bien es interesante ir un poco más allá de los datos duros y conocer gracias a quiénes logramos saber la verdad (como carecemos de libertad/privacidad), lo cierto es que importa más la historia que quien nos la presenta, y allí Citizenfour queda al debe, transformándose en otro reportaje de vlog que idolatra la imagen de Snowden mientras el mensaje pasa a segundo plano, parafraseando a mi postmodernista favorito, el medio es el mensaje, y el mensaje no importa, mientras consumas el medio todo está bien.
Citizenfour falla en lo más importante, en lo que constituye la idea misma de ser un documental; ser visualmente interesante, y presentarnos una historia de manera visual.