Películas de Mierda: Horns [2013]
Me gusta ver películas con Daniel Radcliffe porque ha seleccionado tan bien sus trabajos que a ratos olvido que para toda una generación es Harry Potter. A pesar de la amplia popularidad del rol que lo llevó a la fama, ha logrado separarse de él, pero en ese árduo camino por borrar la cicatriz del mago, ha cometido varios errores, y sin duda uno de los más reciwentes es Horns.
Horns podría ser una excelente película, la premisa es admirable: un tipo despierta y le comienzan a salir cuernos, estos cuernos le brindan distintos poderes, hasta el punto que lo convierten -ya hacía el final de la película- en un demonio que busca la venganza, o justicia, depende del punto de vista del espectador. Premisa que, acompañada de su sobresaliente departamento de arte (el maquillaje es increíble), y del ritmo bien logrado que posee, pareciesen una fórmula imbatible.
Enamorados ad nauseam
El problema de Horns es que nunca terminas de creer la construcción de personajes, todos son el prototipo del arquetipo del cliché que hemos visto en cualquier película, el bueno es bueno, el malo es malo, la niña virginal es virginal, la cámara quiere ser famosa, y las fuerzas de poder fácticos son homosexuales reprimidos.
Hola, metáfora visual!
Sin algo tan importante como personajes creíbles todo el buen trabajo artístico y visual poco pueden hacer. Y la película se transforma otra más entre las muchas producciones fruto de las mentes más creativas de Hollywood pero sin corazón, sin desarrollo. Al final, entretenimiento con Harry Potter haciendo de No-Harry-Potter.
