El Problema de los Tres Cuerpos [Libros Recomendados]

Publicado por Geraldy Cañete en

“Enarbolaba la bandera como si se jactara de su impetuosa juventud, convencida de que el enemigo acabaría sucumbiendo bajo las llamas de la Revolución, imaginando que al día siguiendo del ardor que corría por su sangre nacería un mundo ideal…”

El Problema de los Tres Cuerpos no tiene solución, del mismo modo que el establecimiento del bienestar de la humanidad completa. Es por eso que Cixin Liu lo utiliza para ilustrar su tesis fundamental: que el mundo de los fenómenos puede ser tan impredecible como el corazón de los hombres. Y lo hace a través de una narrativa que evoca lindas metáforas que funden crueldad con la ineludible mortalidad de nuestra existencia.

En esta primera parte de su trilogía, editada en español por Nova (Ediciones B), la crisis política de la China posrrevolucionaria es el escenario perfecto para contar el destino de un grupo de científicos que abandonan el conocimiento objetivo por las reflexiones filosóficas, mismas que, una vez interceptadas por las masas, se convierten en una suerte de nueva religión a la espera de la llegada de su Mesías, desde el espacio exterior.

“Siguió embriagada por la roja y espléndida pasión de su sueño hasta que una bala le atravesó el pecho, tan tierno a sus quince años que el proyectil apenas se detuvo antes de salir silbando por su espalda. La joven guardia y su bandera se precipitaron al vacío, la primera casi más despacio que aquel paño rojo, como si se tratara de un pájaro enamorado del cielo que se niega a abandonarlo”

Durante la primera parte de la novela, la épica del discurso revolucionario, de los abruptos cambios socio-políticos, se contrapone con su inmediata decadencia. El destino de esta joven guardia que en 1967 diera su vida por sus ideales, funciona como una sinécdoque del ocaso de la civilización. Y este es el verdadero problema que profundiza Liu hacia el final del libro.; el hastío del hombre hacia el hombre, palpable en el abandono de las ciencias.

El Problema de los tres cuerpos

La trilogía de Cixin Liu

Lo que la política le hace a los cuerpos, no sólo a los cuerpos humanos, también a los bosques, y el resto de criaturas con las que compartimos planeta, esa voracidad que nos permite mutilarlos, eliminarlos o simplemente conducirlos con la mayor severidad posible, es el catalizador del fin del mundo que plantea Liu. ¿Qué tal si no somos tan inteligentes como nos gusta creer? ¿Que tal si la ciencia, nuestro pilar principal en la defensa de la dignidad humana es también la responsable de las más horribles devastaciones? ¿De quién es la culpa? ¿del científico que explora nuevas posibilidades sin pensar en las consecuencias? ¿o de los ambicioso líderes sin un dejo de ética?

“A continuación, los guardias rojos tomaron distancia y comenzaron a dispararle como si de un blanco de práctica se tratara. Para entonces, ella no sentía nada y las balas que la acribillaban eran como gotas de lluvia fina, sus lánguidos brazos a penas se mecían, eran como enredaderas por las que resbalaba el agua.”

Avanzando desde el drama político a la ciencia ficción más técnica, Liu dibuja la posibilidad del aniquilamiento de la raza humana y lo que eso significa para los líderes que, con un objetivo común, se unen en una nueva campaña bélica. ¿Y si lo único capaz de unirnos como especia es la necesidad de acabar con otra? Esta es la terrible interrogante con la que nos quedamos al final de El Problema de los Tres Cuerpos. Cuyo final, aunque irregular y un poco apurado en sus ansias de generar un cliffhanger, nos obliga a pensar en quién es el verdadero enemigo.


Geraldy Cañete

Realizadora de Cine & TV Me gusta el cine, los gatitos y la filosofía, Con tendencias adictivas a las series de TV y las papitas.