Estreno: Kingsman, El Servicio Secreto

Publicado por Geraldy Cañete en

Con una explicitez alegre y desbordante, que funciona como contrapunto al cartuchismo solapado de las 50 Sombras, que continúa eclipsando la cartelera local, llega Kingsman: El Servicio Secreto. La nueva adaptación de Matthew Vaughn, a partir del comic de Mark Millar y Dave Gibbons, que cuenta las peligrosas hazañas realizadas por los caballeros postmodernos, quienes en total anonimato luchan por mantenernos a salvo.

"Manners maketh man". Colin Firth dando lecciones.

«Manners maketh man». Colin Firth dando lecciones.

En su reinterpetación, Vaughn tiene el acierto de enfrentar a Colin Firth (Harry Hart, nombre clave Galahad) y Samuel L. Jackson (Valentine), un perfecto exponente de la gallardía y caballerosidad celebrada por la aristocracia inglesa, versus los afanes genocidas de un escasamente educado Valentine, avalado por su robusta fortuna. Y en medio de ambos el cambio generacional representado por Eggsy (Taron Egerton), el nuevo aspirante a caballero que logró vencer las duras condiciones de su entorno social, marcado por la violencia doméstica y la pobreza. Harry apuesta por Eggsy no solo porque su padre le salvó la vida años atrás, sino porque cree que los tiempos ameritan un cambio estructural entre los suyos, convenciendolo de que el ser caballero no es una condición de clase sino un código a través del cual se vive. Cambios que no le parecen ni prudentes ni necesarios a su líder, Arthur (Michael Cain, por supuesto), quien intenta en vano frenar el avasallador avance del progreso.

Con la hipertextualidad presente en todas las producciones más exitosas del último tiempo, Kingsman ofrece numerosos guiños a los clásicos que forjaron el imaginario del género de espías, a la obra de Millar y a otros exponentes de la cultura pop (Mark Hamill y Jack Bauer entro ellos), junto con cuidadosamente coreografiadas secuencias de violencia -Vaughn hace gala de su estilo- que nos recuerdan que el horror y la muerte sólo son preocupantes y reprochables cuando afectan a quienes nos preocupan, y a las mascotas domésticas.

Lucha de clases

Lucha de clases

Y aunque la propuesta pueda parecer incorrecta o excesiva, con un relato convencional que sigue al pie de la letra los hitos clave en el recorrido del héroe, difícilmente se le pueda considerar como película, tan inesperada como el ingreso de Eggsy al servicio secreto. Una película entretenida y llena de comentarios a los fans, que se alarga innecesariamente a veces pero que cumple con la dosis de gore y horror que promete desde el comienzo.

 


Geraldy Cañete

Realizadora de Cine & TV Me gusta el cine, los gatitos y la filosofía, Con tendencias adictivas a las series de TV y las papitas.